¿Hablas inglés… o solo lo entiendes?
¿Alguna vez te ha pasado que entiendes casi todo lo que escuchas en inglés, pero al momento de hablar… te quedas en blanco? Tranquilo, no eres el único. Muchos estudiantes se sienten cómodos leyendo o viendo series en inglés, pero hablar sigue siendo un reto.
Este fenómeno es más común de lo que crees. Aprender una lengua no es solo cuestión de memorizar vocabulario o reglas gramaticales; también se trata de entrenar el oído, la mente *y* la boca. En carreras como Lengua Inglesa, lo aprendemos a fondo: hablar un idioma es tan físico como mental. De hecho, es como hacer ejercicio. Puedes leer sobre fútbol todo el día, pero si nunca pisas la cancha, no vas a meter muchos goles, ¿verdad?
Entonces, ¿qué podemos hacer? La clave está en perder el miedo a equivocarse. Habla, aunque cometas errores. Usa aplicaciones, grábate, conversa con extranjeros en línea o incluso en persona. No necesitas vivir en Estados Unidos para practicar tu inglés: solo necesitas perder la vergüenza. En nuestras clases, aprendemos que la fluidez llega con la práctica, no con la perfección.
Comprender estos temas no es solo tarea de expertos; es parte de ser ciudadanos activos en un mundo cada vez más conectado. Atrévete a hablar: tu inglés está más listo de lo que crees.